REHABILITACION Y AMPLIACION DE LA ESCUELA DE MUSICA EN USURBIL // os3 arkitektura

El proyecto de reforma y ampliación de la escuela de música Zumarte se genera hilvanando soluciones a distintas premisas:

– preservación y reutilización de elementos preexistentes “valiosos” en el paisaje del lugar como el tilo y la villa decimonónica en primer plano y el paisaje montañoso del fondo.
– necesidad de un espacio público de acogida y reunión enlazado con la calle de acceso principal.
– Resolver la accesibilidad de la escuela de una forma que resulte cómoda y funcional, sobre todo, para los usuarios más pequeños.

La ampliación se plantea como un artefacto que da respuesta a estas necesidades. Ocupando lo que era el jardín, abraza a la villa desde todos sus flancos, pero dejando que respire. La sección del artefacto varía para adaptarse a sus cometidos. Su cubierta se conforma en plaza pública en la cota de acceso principal y por el norte absorbe enteramente a la villa existente para conformar el nuevo núcleo de comunicación vertical, liberando así la planta original de la villa para las aulas de mayor tamaño. La mayor parte del programa se sitúa en la cota más baja, al nivel de la calle inferior, algo más baja que el semisótano existente. El edificio se extiende hasta los límites impuestos por el lugar, generando pequeños vacíos que funcionan como pozos de luz, aire y naturaleza dentro de la escuela y proporcionan visuales cruzadas entre distintas aulas y espacios interiores. La situación del solar, entre dos calles a distintas cotas permite, mediante la nueva sección del edificio resolver la accesibilidad de la mayor parte del programa sin necesidad de usar el ascensor. A su vez, la altura libre necesaria para el ascensor en la última planta obliga a replantear la cubierta a cuatro aguas del edificio original. La nueva cubierta absorbe la altura del ascensor en su parte norte y va perdiendo altura mediante planos discontinuos para recuperar la escala del edificio original y, a su vez, permitir una iluminación cenital en los espacios de bajocubierta. Los muros de carga de la villa original sirven de soporte a la nueva estructura de paneles madera contralaminada, que se extienden también a la zona ampliada conformando el volumen edificado que envuelve la plaza de acceso. Con la cubierta vegetal sobre la ampliación se recuperan el verdor y la naturaleza que rodeaban a la villa antes de la intervención.

El edificio es una clara apuesta por los materiales renovables, ecológicos y saludables. Para la construcción de este nuevo espacio, de 1213m2 de superficie, se ha utilizado un volumen de 220 m3 de madera pino radiata y alerce procedente de explotaciones sostenibles del País Vasco, que han evitado la emisión a la atmósfera de 170 tn de CO2.